¿Alguna vez has sentido una epifanía? Si la respuesta es "Sí" seguramente la primera temporada de True Detective tuvo mucho que ver, de lo contrario, no sé qué esperas, a menos que seas Tarantino y te aburran las cosas que, en mi humilde opinión, son dignas de comentar y recomendar.
Cuando empecé a ver la serie que es escrita por Nic Pizzolatto, era normal que sintiera confusión espacio-temporal, pues quién no va a tardar en entenderla si Rust simplemente no se parecía al Rust acabado por la vida, me tomó un tiempillo en entender cómo era contada la serie y saber que aquél señor que se encontraba llevado por la miseria de la vida era Rust y que no había nada qué hacer para cambiarlo.
A primera vista podía ver como la serie tenía una tonalidad digna de las películas que suelo ver "texanas", podrías incluso a llegar a sentirte sucio cuando te sumergías del todo en la serie que solo consta de 8 capítulos. Ese color distintivo de la serie también se debía a que principalmente las tomas eran cerradas y cuando finalmente nos topábamos con tomas "abiertas" nos llenábamos de ansiedad por pensar que algo drástico iba a pasar. Un ejemplo de cómo me acostumbre a que las tomas abiertas significaran acción es en el plano secuencia del capítulo 4, sin duda alguna es una de las mejores producciones que he visto en series de televisión y por supuesto que HBO no nos iba a decepcionar.
En mi caso, lo que más me pudo acercar a la trama y lo que singularmente me atrapó desde un inicio es la pulcritud de los diálogos tanto los de Matthew McConaughey y Woody Harrelson. Particularmente las escenas en los carros eran descargas filosóficas que no resultaban para nada pesadas, y esto tiene mucho que ver con que Marty era el "polo a tierra" lo que nos podría representar a la gran mayoría.
Una de las cosas que me gustaría resaltar sobre la trama de la primera temporada, es que es una serie detectivesca que se ahoga en la cruda realidad, si bien puedo decir que cae en clichés como los de "Bad cop, good cop" lo vuelve singular y simplemente el hecho de que estos dos detectives dediquen prácticamente la mitad de su vida a un casi medianamente complejo, lo vuelve totalmente creíble y sin duda fuera de la común vista de las series de detectives en el que los protagonistas son capaces de resolver infinidades de casos complejos.
Y si algo puedo agradecerle a mi clase de series de televisión es analizar esta serie, me parece increíble que haya tardado tanto tiempo en dedicarle mis horas de procastination a una serie de televisión tan maravillosa.
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